
Negro sobre Blanco propone una interacción creativa en primera persona. Una pieza construida de otras muchas piezas. Entramado de materiales donde se descubre y reflexiona sobre la idea de obra y artista al mismo tiempo, una paleta de grises donde se cuestiona la construcción de perspectiva histórica, punto de vista, de interpretación, de métodos y procesos de identificación entre de «autor» y «creador«.




Ensamble de piezas que buscarían romper distintas ideas de referencia, signo, significante y significado determinado por la palabra, un viaje entre forma, rito, intuición y contenido, y que a veces sostiene un ritmo mental, vital, una experiencia danzada sobre lo duradero y lo compartido generando un diálogo horizontal entre los materiales que contrastan perspectivas eurocéntricas de la modernización, modos de producción de sensibilidades y sus distintos procesos constituidos por la globalización.
Negro sobre Blanco nace un proyecto de Investigación y creación en artes vivas desarrollado entre Stgo de Chile y Madrid, financiado por el Ministerio de las Culturas y las Artes de Chile MINCAP 2021. Fondo de residencia de Creación. Fondart 2021. La creación devenida concluye en la escritura del texto «Negro sobre Blanco» (Conversacciones sobre la interpretación y creación en danza Vol. II) y una serie de prácticas que articulan distintos gestos creativos- performativos mutantes.
Pieza presentada en el ciclo Experimental 3. Espacio La Mixta. Santiago Chile 2022.






En un momento tan acontecido como el actual, especialmente en materias de desterritorialización, migración y distanciamiento, de constantes bombardeos y atosigante de nuevas palabras que disfrazan viejos y conocidos significados, se hace imprescindible impulsar espacios de creación- reflexión y pensamiento sosegado, libre y desjuiciado que nos permitan repensar distintas formas, fuentes y procedimientos de conocimiento sensible.
En este sentido, Negro sobre Blanco invita a entregarse a la tentativa de perder el sentido del verbo, la cultura de las palabras y el uso de la voz, por medio del ensamble de materiales coreográficos que vinculan de forma directa y dialógica piezas sonoras, texto y lenguaje corporal. Su estructura performativa busca aproximarse a nuevas formas de creación coreográfica para imaginar nuevas maneras de percibir el cuerpo en movimiento a través de la escucha de voces y de archivos sonoros con contenido histórico, político y social.